Cabo Coñoveral

Te veo aparecer moviendo el culo:
¡Tres, Dos, Uno, ignición!
ya sin ninguna clase de disimulo
como un cohete se dispara mi erección.

Me pregunto ¿cuál será el destino
de tan magnífico proyectil?
Con un poco de suerte: tu chumino
Sólo de pensarlo me pongo a mil.

Despega mi rabo sin ningún tapujo,
un poco más y asomará por la bragueta,
me voy acercando a ti y te la estrujo;
estás que te mueres porque te la meta.

Se está abriendo la plataforma de aterrizaje:
¡joder, cacho guarra, depilate el vello
que no hay quien apunte con tanto follaje!
Otro misil que contra tus lianas estrello.

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Gusnabo Gordo Becquer.